Controversial
Ciertamente no sabemos si la sociedad mundial será capaz de enfrentar los complejos desafíos, como el cambio climático y demográfico, el agotamiento de los recursos, las injusticias en la distribución y las oportunidades.
Lo que sí SABEMOS es que sólo descubriremos dónde están nuestras oportunidades futuras y cuál “gran relato” describe nuestro potencial futuro si logramos hacer que nuestra comunicación sea transcultural y transdisciplinaria, ¡si logramos desarrollar formas moderadas de discusión y controversia! Esta comunicación participativa y controversial no puede ser pacificada o canalizada por llamados morales a la moderación (Paulo Freire).
Tal tipo de comunicación deberá exhibir una inteligencia suficientemente flexible en la elección de los temas, en la búsqueda de los participantes y socios correctos, así como en los asuntos de la súbita excitación, así como de largo aliento. La competencia comunicativa central de los impulsores, activistas, visionarios en la búsqueda y el movimiento es el detonante y el fructífero diseño de controversias.
En contexto,
Buscamos el punto de partida del aprendizaje para comunicar en el sujeto: en el individuo, el promotor, el grupo de interés, la institución, la región, la Nación … ¡Empoderamiento del sujeto! Es decir, nos distanciamos de los instrumentos de comunicación y marketing sin contexto. La comunicación sin contexto sirve quizás para generar aceptación. Muchas veces es verticalista y llena de intereses propios no transparentes.
La comunicación participativa se comprende como un proceso deliberativo de percepción y conocimiento, de formación de voluntad, toma de decisiones e implementación. Para ello, los participantes precisan recursos y espacios públicos (justa asignación de los recursos).
Irónica
La comunicación para la sustentabilidad es una aptitud fundamental deliberativa. Trabaja con la «gran narrativa», con metáforas, ironía, controversia, participación, conservación, reedición, Ready-made, reducción por intención. La ironía es justamente una fuerza impulsora que nos obliga a probar sucesivamente todas las formas de irreverencia, a decir todas las insolencias.
Dialógica
La comunicación para la sustentabilidad es una competencia dialógica, un lenguaje común: cuando se mira a través de dos ojos, se genera una nueva dimensión. El requisito para un lenguaje común es reconocer las competencias y las perspectivas del otro, la relativización de las propias y la capacidad de poder manejar interrogantes no resueltas y soportar no tener aún ninguna respuesta. Esta capacidad entrena la capacidad de percepción; sus métodos son los de detenerse, hacer un alto para la verdadera reflexión.
Encontrará nuestra oferta de asesoría para su comunicación aquí